
Una pregunta muy interesante llamaba mi atención hace unos pocos días, cuando realizaba un vuelo a Carúpano, me disponía a sentarme en mi asiento y una pasajera me preguntó si nosotros leíamos la libreta de chequeos, inmediatamente le respondí lo que es totalmente cierto, claro que la utilizamos en todas las fases del vuelo, puede usted estar tranquila. He querido comenzar con esta corta pero importante anécdota, que tan solo involucra a una pequeña parte de lo que es este inmenso mundo en el que todos los integrantes de Comeravia y todos los involucrados en las operaciones aéreas a nivel mundial estamos sumergidos de cabeza hasta sin sospecharlo. Una inmensa responsabilidad llevamos a cuestas cada uno de los miembros involucrados, la vida de otros.
La seguridad en las operaciones aéreas no es hoy en día el simple hecho de que los pilotos despeguen y aterricen con seguridad una aeronave, todo esto va mucho más allá de la simple operación de una máquina. Es importantísimo que cada una de las personas que en esta compañía trabaja se sienta involucrada en la seguridad de nuestros pasajeros, de nuestras tripulaciones, de nuestros técnicos de mantenimiento, de nuestro tren de trabajo administrativo, nosotros somos los responsables directos de nuestra propia seguridad y de la seguridad de todas las personas que en nuestras manos colocan su vida.
No existe labor pequeña cuando se trata de seguridad operacional, la tarea más insignificante puede llegar a convertirse en una labor crucial a la hora de la investigación de un accidente aéreo. Una simple hoja y un poco de autoconfianza podrían causar un accidente. Supongamos que en la carpeta de procedimientos o en el AIP de la aeronave faltó el procedimiento instrumental de arribo al Aeropuerto de Barcelona, y a la llegada al mismo nos encontramos con un aeropuerto meteorológicamente complicado. Los pilotos sienten la necesidad inmediata de aterrizar ya que su misión inicial es aterrizar en la ciudad de Barcelona, además de esto ambos se sienten en la plena capacidad de hacerlo ya que conocen de sobra el procedimiento, pero al intentar la aproximación, notan que la situación es más dura de lo que se imaginaron y comienzan a entrar en una condición de estrés operacional, se concentran demasiado en el procedimiento y no le dan importancia a otros problemas que son igualmente trascendentales, como podrían ser por ejemplo: una llamada de advertencia de aproximación, la lista de chequeos omitida, y en el mejor de los escenarios, deben realizar una aproximación frustrada, y en ese preciso instante el piloto que se encuentra sumergido en un profundo estrés situacional, olvida la dirección o rumbo a donde debe realizar el viraje. Desastre, he aquí la pequeña diferencia entre ir o no ir a dormir a casa ese día.
Así mismo una pequeña distracción durante una actividad normal de mantenimiento puede convertir un vuelo “rutinario” en una emergencia en el mejor de los casos. El retraso en la compra de alguna pieza o repuesto que se creía poco importante o no tan urgente, la falla en el flujo de la información o la falta de comunicación eficaz y efectiva. Son muchísimas las variantes del factor humano dentro de su incumbencia en la seguridad operacional.
Integrantes de Comeravia, volemos seguro, creemos una conciencia colectiva donde las personas no teman admitir sus errores y hacerlos saber, donde cada “pequeño papel” que desempeñamos en la compañía es parte de una inmenso engranaje de acciones que nos permiten sentirnos orgullosos de estar cumpliendo cabalmente nuestro trabajo.
“Recuerde siempre que nuestra obligación no es solo hacer que el avión despegue, nuestra principal obligación es lograr que aterrice seguro”
Nota: Traducción de la imagen, "Todos los miembros de una organización tienen un papel importante en la seguridad de vuelo" (tomado de la página web del centro de investigación y prevención de accidentes aeronauticos, Brasil)
No hay comentarios:
Publicar un comentario